sábado, 28 de septiembre de 2013

UN MAGICO ORGASMO>SEGUNDA LUNA>CAPITULO 5

     Bien, lo prometido es deuda al día de hoy la encuesta arrojo un resultado aplastante, la gran ganadora fue "UN MÁGICO ORGASMO", pero para los que votaron por "LA VENGANZA DE UNA FELINA" no se preocupen, en cuanto la historia de Brittany llegue a su conclusión, Mina volverá a la carga con toda su belleza y sensualidad, a menos claro esta que obtenga una terminal propia y entonces las publicaciones vuelvan a sus días habituales de publicación en miércoles y domingo (deseenme suerte, estoy tratando de conseguirla), también les aviso que estén pendientes pues habrá un especial de halloween para este 31 de octubre protagonizado por la rubia rebelde y malhumorada favorita de todos, sin mas que decir los dejo para que disfruten este capitulo que a mi parecer es de los mas importantes de la historia, SUERTE¡.


ATTE.
ESCRITOR TG


CAPITULO CINCO
"primer intento"

     Es una cálida noche de viernes en Los Ángeles, en la mejor zona de la ciudad se deja ver una escena poco común, en la puerta de un elegante y prestigioso bar una chica pelirroja  de aspecto desaliñado y un apuesto muchacho llevan casi arrastras a una rubia al interior del lugar, llamando mucho la atención.

-vamos amigo tienes que intentarlo o jamas vas a lograr salir de esto- decía Josh en tono amigable mientras tomaba del brazo gentilmente a Britany
-es cierto- recalco Clarisse -si no lo intentas no sabras si funciona o no-
-pero es que no me siento lista, yo creo que podemos esperar un poco para que lo asimile bien , no?- replicaba Brittany mientras clavaba los tacones en el piso para que no la pudieran mover de donde estaba -entren ustedes y me dicen que tal esta el ambiente ok-

     En eso Clarisse la soltó y comenzó a buscar algo dentro de su mochila.

-no quería llegar a esto pero tu me obligas-
-¿que vas a hacer?- pregunto Brittany asustada escondiéndose tras de Josh
-mira esto- Clarisse saco de su mochila la fotografía de Kehit con el pato ginecólogo en la mano -¿quieres pasar por esto una vez mas?-

     El semblante de Brittany cambio, su rostro era ahora de determinación, y respirando profundo se aliso la blusa, se acomodo los pantalones y se encamino a la entrada del lujoso lugar.

-bien que esperan, no tenemos toda la noche¡-


     Unas horas antes:

-no se si esto sea buena idea?- refunfuñaba Brittany frente al espejo
-no perdemos nada con ir a buscar oportunidades, ademas ya estas casi lista, te ves preciosa- respondió  su amiga que la observaba desde la cama
-no te pases, esto no es justo yo no puedo contenerme de arreglarme por la magia y tu te niegas a hacerlo, deberías por lo menos maquillarte por solidaridad-
-tu sabes que no es mi costumbre ademas la que va a buscar novio eres tu no yo-
-YO NO BUSCO NOVIO¡-
-ok, ok, no te alteres tu sabes a lo que me refiero

     Brittany estaba malhumorada por que no podía evitar arreglarse, intentaba contenerse desde su interior pero no lo lograba, el hechizo funcionaba a la perfección, se paso una hora escogiendo la ropa que se pondría, al final escogió unos jeans ajustados con corte a la cadera en color negro una blusa blanca que no tenia mucho escote y sandalias tipo sueco de una altura moderada, de unos siete centímetros, después paso otra hora arreglado su cabello y maquillándose a la perfección.


De vuelta al presente:

     Por ser viernes el bar estaba a reventar, los tres amigos se sentaron en la barra en la parte del fondo para poder tener un buen dominio visual, Josh y Clarisse se sentaron juntos  dejando un asiento de distancia de Brittany para dar la impresión de que estaba sola.

-ok ya estamos aquí, ¿ahora que hago?- dijo Brittany un tanto gruñona
-pues lo primero buscar alguien con lo necesario para conseguir nuestro objetivo- respondió Clarisse acomodando sus gafas y escudriñando el lugar
-yo se que es difícil, pero seria bueno que fuera alguien que te parezca atractivo por lo menos- replico Josh mientras estiraba el cuello para revisar también

     En eso se acerco un tipo un tanto raro y desgarbado, ataviado con una camiseta negra,  un pantalón a cuadros que le llegaba a los tobillos, y lentes mas gruesos que los de Clarisse y dirigiéndose a la rubia comenzó a hablar con voz aguda y un tanto nasal.


-hola preciosa, veo que vienes sola, ¿que te parece si te invito un refresco?-Brittany lo miro por encima del hombro y contesto despectiva y altanera
-heee... yo creo que mejor te pierdes antes de que venga mi novio y te rompa la cara perdedor-

     El chico se fue un tanto decepcionado de regreso a su lugar, a Brett nunca le cayeron bien los nerds, acostumbraba burlarse de ellos y humillarlos, y el hechizo aun no había cambiado eso, si toleraba a Clarisse era por que Josh se la había impuesto en un principio y después se acostumbro a ella, no era de sorprenderse que ni siquiera le diera la oportunidad a uno de acercarse, menos de intentar tener sexo con ella.

-que fue eso?- pregunto Josh a la distancia
-si tengo que hacer esto no lo voy a hacer con un perdedor y menos uno tan horrendo como ese-
-ay¡ Brittany yo creo que ese muchacho podría haber sido tu salvación- le espeto Clarisse moviendo la cabeza
-pues si tanto te gusta quédate con el, haber si ya sales- le contesto grosera Brittany
-ya te había advertido que no la trataras así¡- le reclamo Josh a la engreida rubia.
-pues déjenme escoger a mi sola yo se lo que hago-
-de acuerdo si te sientes tan segura, nos regresamos a casa... ha me llevo el auto te regresas en taxi-

     De esta manera Josh y Clarisse salieron del bar dejando a Brittany y a su enorme ego, que sin duda era uno de los remanentes de la personalidad de Brett.

     La chica estuvo buena parte de la noche rechazando propuestas, no obtuvo todas las que creía pues su aspecto no era como el de las otras chicas que estaban de "caceria", a su alrededor había verdaderas preciosidades ataviadas con minifaldas, minivestidos con escotes de escándalo, y tacones de vértigo, que las hacían lucir realmente espectaculares.




-ay mamitas ricas¡- pensó para si misma -si tan solo fuera yo realmente, no se me iría una viva, pero no importa hoy mismo deshago este estúpido hechizo-

     Fustigada por ese motivo busco con insistencia, hasta que de repente entro por la puerta del lugar un hombre alto, guapo, fornido, con actitud de perdonavidas, exageradamente bien vestido con un saco Armani, una camisa de Ralph Lauren y calzado italiano.

-¿este tipo me recuerda a alguien?- pensó Brittany al verlo desde la barra -claro, a mi¡, esta es mi oportunidad.

     Cuando vio que el tipo se sentó en una mesa y estaba solo, Brittany se levanto rápidamente de la barra y se dirigió a el atravesando la pista de baile, se sentó junto del hombre sin mas ni mas y lo saludo ofreciendo su mano.

-hola soy Brittany, tu como te llamas?-
-guau¡ que directa, me llamo Michael-
-no eres de aquí verdad?-
-no, vengo de Nueva York-
-voy a ir directo al grano, ¿quieres tener sexo conmigo?-
-caramba¡, eso es lo que yo llamo hospitalidad- respondió Michael con cara de asombro y satisfacción al mismo tiempo -por supuesto que me gustaría¡-
-bien, entonces vayámonos de aquí-


     Al mas puro estilo de Brett, Michael tenia un deportivo rojo espectacular, en el cual llevo a la atrevida rubia a un hotel de lujo, subieron a la suite que el galán alquilo por toda la noche.

-adelante preciosa- le dijo Michael mientras caballerosamente le abría la puerta del dormitorio
-si verdad, ni modo que me quede aquí afuera jaja...- contesto, riendo nerviosamente con las manos húmedas y sudando frió -voy a ponerme cómoda- dijo, citando una de las tantas frases que chicas con las que había estado antes, usaban en momentos así.
-aquí te espero lindura- contesto zalamero tratando de besarla, a lo que Brittany reacciono rápido dando la vuelta para tomar un par de mini botellas del frigobar, una de tequila y una whisky y despues entrar al baño cerrando la puerta de golpe.

  


      Dentro del baño Brittany se miraba al espejo dando respiraciones profunda y tratando de convencerse a si misma de que tenia que hacer lo que tenia que hacer para volver a ser el hombre que extrañaba ser.

-ufff... vamos Brett, es solo una vez nada mas, no va a ser tan malo, solo imagina que el eres tu y que tu eres una conquista mas, glub¡...- bebió el contenido de la  mini botella de whisky que tenia en la mano de un solo golpe y comenzó a desnudarse, cuando ya solo estaba en ropa interior se quedo mirándose en el espejo.     -caray que buena estoy, de verdad que este tipo se va a llevar un buen trofeo, bien aquí voy- volteo hacia la puerta tomo la perilla y justo antes de girarla se quedo paralizada.
-te estoy esperando pequeña- escucho la chica desde el otro lado de la puerta
-ya voy amigo, no me apresures- contesto enojada -recuerda el pato, recuerda el pato, glub¡...- se dijo a si misma y cerrando los ojos bebio el contenido de la mini botella de tequila, la que despues arrojo a la basura y salio del baño sin abrir los ojos.


     Respirando profundo una vez mas, Brittany abre los ojos lentamente para encontrarse a Michael desnudo en la cama.

-¿por que tardaste tanto muñeca?- le pregunto en tono pícaro, mientras acariciaba el colchón, e insinuándole con la mirada que se acercara.

     Brittany no contesta, solo aprieta los puños y se abalanza sobre el joven besandolo de manera salvaje como si no quisiera sentir nada, el responde a la "agresión" de la misma forma y le arranca las pocas prendas que aun tiene puestas de un solo tirón, la nueva chica trata con todas sus fuerzas de contener el asco que siente y que se mezcla con sensaciones de placer cuando el muerde y aprieta sus pechos con una fuerza desmedida.

-aaau¡... despacio, eso duele¡- le exigio Brittany al excitado galán.
-y es... solo... el principio... nena- contesto Michael con la respiración jadeante y entrecortada

     En menos de un minuto Michael estaba listo para penetrarla, se puso un condón y sin avisarle la voltea, ella jadeante le pregunta que hace, pero el no contesta y sin aviso alguno introduce su miembro erecto en la novel vagina de Brittany, que grita desgarradoramente pensando que esto es peor que lo del ginecólogo.

-AAAAAAAAAAAAAAAAY¡ DESPACIO... POR... FAVOR- pedía Brittany, sin recibir respuesta alguna

     El tipo comenzó a follar a la chica sin piedad alguna, aprovechando su fuerza física la tomo de las caderas sin permitirle voltearse y continuo bombeando sin parar, Brittany grita y jadea, acciones que no hacen sino excitar a la bestia dentro de Michael que escuchándola aumenta la velocidad.

-aaah... aaah... aaayy...- gemia Brittany, mas de dolor que de placer, mientras soportaba los embates del brutal hombre.
-así muñeca... así, se ve que lo gozas-

     Michael comienzo a jadear también y sin sentir el menor remordimiento se corre rápidamente, al terminar se sale de ella y la deja boca abajo en la cama aun gimiendo de dolor, pero el infame hombre piensa que es de placer.

-vaya, resultaste muy atrevida para ser virgen- le dijo socarrón mientras retiraba el condón sangrante de su miembro -voy a bañarme-

     Mientras tanto en la cama Brittany no reaccionaba estaba completamente en shock por lo que acababa de pasar, aun no asimilaba del todo que le había dado su virginidad a un tipo deleznable; cinco minutos después Michael sale del baño, se viste y le dice de forma fría y arrogante.

-sigues hai?, bueno no importa, quédate si quieres, la habitación esta pagada por toda la noche- cuando dijo estas palabras, a Brittany le pareció escuchar la voz de Brett Mcarty, es decir su propia voz cuando era hombre, después, Michael saco su cartera y saco un par de billetes de cien dolares que arrojo a la lujosa mesita de noche que estaba junto a la cama -toma es para el taxi, yo me tengo que ir, bye¡ fue un placer "conocerte"- y se fue.

     Brittany seguía tirada boca abajo en la cama mordiendo la sabana con rabia aguantando las ganas de llorar y sin atreverse a voltear a mirar la cara de Michael, pues sabia que no soportaría ver la sonrisa de satisfacción en su rostro, esa misma sonrisa que Brett Mcarty tuvo una infinita cantidad de veces; después de escuchar la puerta de la habitación cerrarse, Brittany se incorporo lentamente para sentarse en la orilla de la cama, el dolor de su cadera y su entrepierna no le permitieron hacerlo mas rápido, voltea la mirada a la mesa de noche y vio los billetes, los tomo entre sus delicadas manos, apretó los dientes y comenzó a destrozarlos con furia mientras gritaba y comenzaba a llorar amargamente, sintiendo frustración como nunca había sentido en su vida.




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