UN MAGICO ORGASMO>DECIMA LUNA CAPITULO DOS

"Liberacion"

     Ver una camioneta de lujo en el boulevar sepulveda representa motivo de alegria para las "trabajadoras" del lugar, al verla muchas de ellas piensan que visitaran un buen hotel en vez de tener relaciones en el asiento trasero, otras que conseguiran la cuota de la noche con un solo cliente, otras que talvez las llevaran a una fiesta y las mas soñadoras que el ocupante es un principe que se enamorara de ellas y las sacara de las calles.

      Para el infortunio de todas ellas, los ocupantes del auto que se mueve lentamente atravez de la calle no tienen intencion de nada de lo mencionado anteriormente; el vehiculo con vidrios polarizados no se detiene en ningun lado, como si buscara algo.

-segun el gps el auto debe estar un par de calles adelante- dijo Keith señalando al frente tratando de guiar a Josh que estaba al volante

-por que no vas mas rapido Josh?- pregunto angustiada Clarisse

-la calle esta demasiado llena de gente, no puedo hacerlo- respondio el conductor tratando de mantener la calma

-abran bien los ojos, tal vez podamos encontrar a Brittany entre las muchachas que estan por ahí- indico el galeno atizvando por la ventana

-por cierto, como es que sabias de este lugar?- pregunto la pelirroja a su pareja no con mucho gusto por cierto

-jeje, no te enojes rojita, no es por lo que tu piensas- contesto sonriente el medico -se de este lugar por que cuando sali de la escuela de medicina, para mis practicas entre como voluntario a una clinica de la zona, que es donde la mayoria de las chicas que trabajan aqui acuden a atenderse y a recibir preservativos y anticonceptivos gratis-

-menos mal- respiro aliviada la roja

-miren! Ahí esta el auto- interrumpio Josh la discusion de los enamorados, se acerco al sitio y estaciono la camioneta, de inmediato bajo para buscar a la hechizada

-quedate aqui linda, y cierra la puerta- ordeno Keith a su novia un poco antes de bajar para acompañar a su amigo

     El par de hombres se acercaron al convertible con la esperanza de encontrar a su amiga embrujada, pero desafortunadamente aun no se daria el encuentro, solamente pudieron ver sobre el capo del auto a dos jovencitas que por su vestimenta se sabia que pertenecian al gremio de la zona.

-hola galanes, estan buscando diversion?- hablo la de apariencia mayor posando sensual, tratando de vender sus servicios y los de su compañera

-que edad tienes?- pregunto el pelinegro un poco indignado

-la que tu quieras que tenga bebé- la joven sexoservidora bajo de donde estaba y se acerco a los chicos

-de donde sacaron el auto?- pregunto Josh con brusquedad

-que te importa? Para que preguntas?- la casi niña tomo una actitud defensiva alejandose de ellos -eres policia o que?-

-tranquilo Josh, dejame hablar a mi si- dijo Keith tratando de contener a su desesperado compañero, dirigiendose despues a las muchachas -tranquila amiga, no somos policias, lo que pasa es que estamos buscando a la dueña de este auto, es rubia, alta de ojos azules...-

-es ella- Josh mostro una imagen en su telefono, la chica se acerco un poco para ver la imagen

-que les debe dinero o algo?-

-no solo es nuestra amiga, necesitamos encontrarla- respondio el doc

-mmm... No se, tal vez la vimos, tal vez no- hablo la prostituta con una sonrisita picara

-ok entiendo, dejame ver si te refresco la memoria- Keith saco su billetera y de su interior un billete de diez dolares, que le mostro a la mujercita -que tal ahora?-

-haa si! Ya me acorde- dijo ella arrebatando el dinero de las manos del medico -estabamos aqui cuando llego, solo bajo del auto, nos dio unos pendientes que parecen valiosos y nos pidio que cuidaramos el coche hasta que regresara-

-no dijo a donde iria o que haria?-

-solo menciono que queria divertirse y fastidiar a alguien dejando que la jodieran por detras, jajaja, debe estar muy molesta con su novio o algo-

-tu crees que la dejen buscar clientes asi nada mas?-

-la memoria se me esta perdiendo de nuevo- esta vez fue Josh quien saco el efectivo -ya recuerdo, el chulo de este territorio es Bear, si su amiga quiere pararse en alguna esquina, tendra que pagar como nosotras, y con lo bella que es de seguro la va a poner en la mejor parte de la calle-

-que parte es esa?- esta vez la chica no tuvo que decir nada, la "propina" aparecion por si sola

-eso es frente al club de la calle ventura, de ahí salen los mejores clientes-

-vamonos Keith, debemos apresurarnos- Josh corrio a su vehiculo con su nuevo compañero pisandole los talones

     Llegar al club no les tomo mucho tiempo, la calle estaba completamente llena de gente, la mayoria non grata; clientes en sus autos y a pie, chulos, algunos dealers de meta y sobre todo prostitutas, por esta razon los tres amigos tuvieron que estacionarse a cierta distancia, desde la cual trataron de encontrar a la bella rubia.

-por aqui tiene que estar- dijo Keith buscando con la mirada

-ya la vi! Ahí esta, frente a la puerta del club- grito Clarisse

-estas segura?- pregunto Josh

-si mirala, su cabello es inconfundible- la rojita tenia razon, a causa de la magia el dorado cabello de Brittany brillaba con mas intensidad que el de cualquier otra persona

-voy por ella- el joven ejecutivo estaba a punto de bajar del auto cuando fue detenido por Clarisse

-espera Josh, "ella" no va a querer venir contigo-

-pero "ella" no me conoce-

-pero Brittany si, las dos comparten memorias, en cuanto te vea huira o incluso podria hacer que el tal Bear te lastime-

-no tengo miedo-

-tranquilo, lo que hay que hacer es ponerle el dije y creo que tengo un plan...-

     Aun entre tantas mujeres hermosas dispuestas a vender sus caricias, la belleza de Brittany resalta en demasia, su blonda cabellera es digna de un comercial de shampo, su perfecto cuerpo envuelto unicamente en un reluciente body de piel negra, con el ziper abierto justo a la altura de los senos y rematado en una tanga que deja ver un apetecible trasero levantado gracias a unas zapatillas de tacon altisimo la convertian en una compra dificil de rechazar, ademas la ojirosada sabia muy bien como posar para ofrecer su "mercancia"

     No tenia mucho tiempo ocupando el sitio en el que estaba, apenas hace unos minutos que llego a un acuerdo con Bear, un tipo enorme y mal encarado con pinta de mafioso, cuando la maldita le propuso quedarse con tan solo el diez porciento de lo que obtuviera por cliente por que ella tan solo queria divertirse, aquel hombre acepto gustoso darle el sitio de privilegio en la entrada del club.

     La chica nueva, atrajo miradas desde que llego, no se limitaba a simplemente estar parada ahí esperando a los clientes, coqueteaba con todos arrojando miradas sexys y lanzando besos al aire a todo el mundo, razon por la cual el primer cliente no tardo en presentarse.

-cuanto estas cobrando preciosa- pregunto el hombre que parecia un motociclista, alto, calvo, de larga barba y todo vestido de piel

-cincuenta dolares amor- contesto ella sonriendole coqueta

     Antes de que el rudo tipo dijera una palabra para aceptar el trato, otro hombre se acerco para interrumpir la negiciacion

-escuche tu cuota muñeca, yo te ofresco cien dolares si te vas conmigo- este cliente era mas bien de tipo mexicano, vestido con pantalones olgados y una playera de tirantes, lo que muchos llamarian un cholo -que me dices "mamacita" te vienes conmigo-

-que te pasa "beaner" yo la vi primero, cierto hermosa- replico el calvo

-pues si tienes una mejor oferta, esto los vale no crees- dijo ella con voz sensual y dandose una palmada en su exquisito trasero

-ok, que sean doscientos dolares- pujo el motociclista

-y tu "papi" vas dejar que me vaya- dijo sexy arengando al mexicano haciendo la mimica de hacer sexo oral

-trescientos dolares "mi reina" orale vamonos- el pandillero la tomo del brazo pretendiendo llevarsela

-sueltala imbecil, yo le doy cuatrocientos-

-quinientos-

     Los dos malhechores iniciaron una batalla verbal ante la beneplacita mirada de la chica, que sonreia maliciosa por haber provocado una pelea por ella.

-mil dolares! Maldito gringo- grito el cholo sacando una navaja de entre sus ropas amenazando a su oponente

-no me asustas "wetback"- el enorme caucasico tambien hecho mano de un puñal

     La sangre estaba a punto de llegar al rio cuando de la nada surgio un pequeño hombrecito, mas bien obeso, de cabello rizado ataviado con un traje y corbata baratos, que se dirijio a la rubia, a la cual apenas le llegaba al hombro.

-tresmil dolares!- dijo aquel personaje dejando a todos frios

-guau! Muestramelos- Britt pidio desconfiada por la apariencia del cliente

-mira- de su raido saco el hombrecillo saco un fajo de billetes de cien y se lo mostro a la bella

-que esplendido cariño, vamonos a donde quieras- con suavidad la ojirosada lo abrazo por el cuello y el la tomo de la cintura

-mi auto esta por alla, vamonos preciosa-

     Asi se fueron caminando alegremente por la acera, mientras Brittany miraba hacia atras y se despedia con un guiño de los dos matones, que se quedaron con un palmo de narices

     Con la rubia a su lado, el hombre camino sonriente por la acera de un par de calles, mirando sonriente hacia todos lados, luciendo a la mujer a su lado como un trofeo; ella por su parte estaba satisfecha por conseguir su objetivo, encontrar al mas horrendo cliente posible para torturar a su contraparte, que podia ver y sentir todo encerrada dentro de su mente.

-mira muñeca, ahí esta mi coche- dijo el gordito señalando el final de la calle mientras se acercaban

-ahh, ya lo vi, tienes buen gusto con los autos, ojala pudiera decir lo mismo de tu ropa-

-que tiene de malo mi atuendo?- pregunto el cliente irritado

-y lo preguntas, esta feo, viejo y huele a cigarrillo- contesto grosera la chica -pero me gusta tu vehiculo, conozco a alguien que tiene una camioneta igual-

-en serio?- mientras le abria la puerta del asiento trasero a la ojirosada, el sarcasmo era muy perceptible en la voz del hombre

-si en serio, vaya hasta tiene las mismas vestiduras y huele igual- todo esto lo noto al subir y acariciar los asientos

     Sin decir palabra el tipo cerro la puerta, la hechizada sonreia esperando verlo subir tambien, pero para su sorpresa eso no sucedio, extrañada intento salir pero los seguros automaticos de las puertas se activaron impidiendoselo.

-que sucede aqui?- preguntaba enojada, tratando de abrir la puerta sin lograrlo

     La ventanilla del asiento del conductor bajo dejando ver la figura del pequeño tipo que supuestamente habia contratado los servicios de Brittany.

-buen trabajo Harvey- la bella escucho una voz conocida -espero que la paga sea suficiente-

-lo es señor Brody, llameme si necesita algo mas, ya tiene mi numero- respondio Harvey y se fue rapidamente del lugar

-TU!- grito sorprendida e indignada la fingida prostituta

-si soy yo, que con eso?- decia Josh cerrando la ventanilla, mirandola desde el retrovisor

-que haces aqui? Sueltame por favor, si?- con astucia "ella" uso el tono meloso que Brittany utilizaba cuando queria convencer a Josh de algo

-no- contesto seco el pelinegro

-ja, no me digas que el presidente de Mcarty inc. Necesita pagar por sexo- con malicia la hembra bajo el cierre de su body, se saco un seno, lamio sus dedos indice y medio de la izquierda y comenzo a juguetear con su pezon -quieres un poco de esto? Mmm...-

-ya basta! Se quien eres, asi que deja de decir estupideces!-

-vaya! El niño bueno quiere hacerse el heroe y salvar a su princesita en peligro- la forma de hablar de la mujer se torno burlona

-si lo que pretendes es insultarme no lo estas logrando, yo seria capaz de lo que sea por ella-

-hasta de hacerla gozar para salvarla de mi y perderla para siempre?- Josh apreto los puños y los dientes mostrando frustarcion al no poder responder la pregunta

-lo sabia, eres patetico, tan solo observa, yo hago con ella lo que quiera- sonriendo malevola, saco el otro seno del interior del body y lo acaricio de la misma forma comenzando a emitir gemidos sexys -mmm, aaaahh, si que rico!-

-ya dejala en paz!- exigio el chico volteando para encararla

-o que perdedor? No puedes hacer nada, jajaja- comenzo a reir el maligno ente

-pero ellos si-

     De pronto de la parte de atras de la camioneta saltaron Clarisse y Keth tratando de ponerle el collar y sujetandola de los brazos respectivamente, el galeno trataba de sujetarla con firmeza, pero tambien con suavidad para no lastimarla, cosa dificil de hacer porque la rubia se agitaba frenetica sin dejar de gritar.

-dejenme estupidos! Sueltenme les digo! Aaaaaaa!-

-sujetala bien Keith!- pedia Clarisse que tenia dificultades para cumplir su mision debido al abundante cabello de la hechizada

-hago lo que puedo, no quiero lastimarla- en un movimiento brusco de Britt a la ex-nerd se le callo el dije

-Josh tu ponle el collar!- grito la roja mientras le levantaba el pelo a la cautiva

-ok!- contorsionandose, el joven enamorado logro alcanzar el collar que Clarisse dejara caer y con rapidez felina salto al asiento trasero y le puso la joya al cuello a una ya casi incontenible mujer

-corporea liberatum!- grito la roja, en ese momento el collar comenzo a iluminarse y tambien el cuerpo de Brittany que dejo de agitarse, por lo que Keith la solto

-me han vencido, pero no ganaran- la hechizada comenzo a hablar con una voz que no era la suya -ella sera mia, ella sera mia- al terminar de hablar toda la luminosidad del cuerpo de Britt comenzba a ser absorvida por el collar hasta perderse en su totalidad, luego el mismo dije dejo de brillar para volver a la normalidad por completo.

     Por algunos minutos la chica dorada permanecio sin sentido, cuidadosamente el medico la solto y Josh la recosto con delicadeza, mientras su amiga colocaba sus rebozantes pechos dentro de su ropa.

     Poco a poco la desmayada volvia en si, impavida se levanto y se quedo mirando a sus compañeros de pandilla sin decir nada.

-mju!, mju, haaaaa!- la pobre chica se arrojo a los brazos de Josh y en un segundo comenzo a llorar copiosamente y sin parar, el joven ejecutivo se despojo de su chaqueta y cubrio con ella a la mujer entre sus brazos, sin decir palabra y comprendiendo el momento, la otra pareja se movilizo hasta los asientos de enfrente, Keith encendio la camioneta y la puso en movimiento con rumbo al hogar de las complices femeninas.

     Por suerte todo termino bien por ahora, todos necesitan descansar, pues aunque "ella" ya ha desaparecido el hechizo sigue su curso y las lunas siguen transcurriendo.